10 dientes de ajo.
120 ml de aceite de oliva, y un poco más extra para rociar.
4 cucharadas de vinagre de vino tinto.
1/2 cucharadita de tomillo seco.
Precalentar el horno a 200 grados. Echar el ajo en un bowl, rociar con un chorrito de aceite de oliva, hasta que esté bien impregnado.
Envolver los dientes de ajo en un papel de aluminio y colocarlos en el horno durante 30 minutos, hasta que estén tiernos.
Pelar y mezclar con los demás ingredientes y triturar.
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