El Aceite de maiz

Spread the love
Print Friendly, PDF & Email

El aceite de maíz es rico en ácidos grasos poliinsaturados ( 58,7 % de ácido linoleico) , o monoinsaturados (24,2 % de acido oleico ) frente a los saturados ( 12,7 % de ácido palmítico y esteárico . Dentro de los aceites grasos poliinsaturados el aceite de maíz es rico en omega-6, ( ácido linoleico). El omega-6 es un ácido graso esencial, cuya importancia en la salud del aparato circulatorio resulta trascendental ( disminución del colesterol, prevención de la arteriosclerosis, disminución de los ataques de corazón). El aceite de maíz es uno de los aceites vegetales con mayor proporción de grasas polinsaturadas, solamente superado por el aceite de nueces que contiene un 63, 3% ( Ver tabla de las grasas). Como la mayoría de los aceites vegetales, no contiene colesterol.

Este aceite es especialmente útil para comer en crudo o cocinado, proporcionando abundantes ácidos grasos esenciales, que son aquellos que el organismo no puede fabricar y tiene que tomar de los alimentos. El mejor aceite de maíz es aquel que se obtiene por presión en frío, sin la intervención del calor, del germen del maíz. Para ello se hace germinar al grano de maíz y luego, después que se haya secado, se extrae el aceite. Este tipo de aceite es rico en vitamina E, que es un tipo de vitamina que se obtiene a través de las grasas vegetales y que constituye un elemento muy importante para la salud del corazón y para la prevención de muchas enfermedades degenerativas, dado que constituye un gran antioxidante. Se ha comprobado que la eficacia del aceite de maíz virgen en la reducción del colesterol es mucho mayor que la del refinado, por la presencia de una proporción mucho más grande de fitosteroles.

El aceite de maíz presenta muy buen sabor y muy buenas cualidades. Su uso permite realzar el sabor de los alimentos, especialmente ensaladas, platos al horno o guisos diversos. Es también adecuado para realizar mayonesa o postres. No debemos olvidar, sin embargo, que, al igual que otros aceites poliinsaturados
( girasol, soja, etc. ) o monoinsaturados vírgenes ( aceite de oliva virgen, colza o cacahuete ) son menos estables que los refinados ( El refinado altera la calidad de los ácidos grasos pero los hace mas duraderos) . Así pues, hay que prevenir que este tipo de aceites se descompongan en contacto con la luz solar o el calor, por lo que deben ser guardados en un lugar oscuro y fresco. Si preferimos que el aceite de maíz sea más duradero y tenga mas resistencia a volverse rancio, utilizaremos aceite de maíz refinado. A la hora de freírlo, al igual que el resto de aceites, es conveniente utilizar pequeñas cantidades y no reutilizarlo para impedir que el aceite desarrolle substancias tóxicas para el organismo. Se ha comprobado que el aceite de maíz tiene una resistencia mayor a la oxidación que el aceite de soja.

No hemos de olvidar que el aceite de maíz, como el resto de las grasas, contiene un gran poder calórico, por lo que hemos de ser prudentes en su utilización ya que un abuso del mismo puede conducir a problemas de obesidad. Una cucharadita de aceite de maíz contiene unas 120 calorías. Para reducir la ingestión de grasas, si se tiene problemas de obesidad o se desea perder peso,es importante que, una vez vertido en la sartén, se deje calentar bien antes de añadir los alimentos. De esta manera, conseguiremos que la comida absorba menos aceite. Se puede optar por la técnica del » salteado» que consiste en freír ligeramente los alimentos con un poquito de aceite mezclado en un poquito de agua. El salteado permite freír sin que los alimentos se empapen con mucho aceite.

El aceite de maíz entra a formar parte de la composición de muchas margarinas vegetales que utilizan este aceite junto con otros aceites de naturaleza vegetal, fundamentalmente soja, oliva o girasol. Estos aceites son tratados con hidrógeno para conseguir estabilizarlos. Como resultado de este proceso, se forman grasas hidrogenas que presentan mejor textura, apariencia y se conservan mejor , pero que actúan en el organismo como si fuesen grasas saturadas y, por lo tanto, menos saludables . Aunque la margarina no contiene tanta grasa saturada como la mantequilla, no es tan aconsejada como el aceite puro. Son más saludables los alimentos que se fríen con un poco de aceite de maíz que aquellos en los que se utiliza la mantequilla, la margarina o la manteca.

El aceite de maíz se utiliza en cosmética para el tratamiento de la piel y el cabello resecos por lo que entra a formar parte de muchos productos elaborados con esta finalidad. Igualmente se utiliza con propiedades terapéuticas para muchas afecciones de la piel ( Véase más información en el apartado » Propiedades medicinales del maíz » en el listado superior.

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.