4 huevos
1 cucharada sopera de azúcar por cada huevo
500 gramos de leche entera
Media barra de pan del día anterior
Caramelo liquido
Ralladura de un limón o naranja
1 pizca de canela
Ponemos a calentar la leche en una cacerola a fuego lento. Añadimos el azúcar, la ralladura de limón o naranja y apartamos del fuego en cuanto empiece a hervir.
Cortamos el pan en rebanadas y lo añadimos a la leche. Dejamos que se empape bien.
Mientras, pre-calentamos el horno a 220ºC, en la bandeja (honda) del horno añadimos agua para que hierva. En un molde de flan o un molde rectangular y ponemos el caramelo liquido (como un dedo de espesor).
Con la batidora eléctrica batimos la leche para deshacer el pan para que nos quede el pudin más fino. Vamos añadiendo los cuatro huevos y volvemos a batir todo bien. Vertemos despacio en el molde caramelizado y echamos la canela por encima.
Colocamos el molde encima del agua y dejamos que se haga a 180ºC durante 45 minutos. Pasado este tiempo, pinchamos con un palillo y si sale limpio es que ya esta cuajado. Se dorara por encima pero si es excesivo podemos cubrir a medio cocción con papel de aluminio.
Dejamos enfriar y lo dejaremos como mínimo 5 horas en el frigorífico. Pasamos un cuchillo con punta redonda alrededor del molde, tomamos una fuente con algo de fondo, ponemos encima y con cuidado damos la vuelta al molde.
