2 remolachas chicas
1 huevo
1 cubo de caldo de verduras
2 cucharadas de aceite
1/2 taza de queso rallado
2 cucharadas de fécula (maicena, chuño)
1 taza de agua mineral con gas
harina cantidad necesaria
sal,
pimienta
nuez moscada a gusto
Cocinar las remolachas enteras con cáscara y un trozo del tallo.
Una vez cocidas, pelarlas y ponerlas en el vaso de la licuadora junto con el huevo, el aceite, el cubo de caldo, el queso rallado, la fécula y el agua mineral.
Licuar todo y poner la preparación en un bol.
Agregar harina de a poco integrándola bien hasta lograr la consistencia de una masa de buñuelos.
Condimentar a gusto.
Poner abundante agua en una cacerola y cuando comienza a hervir agregarle sal gruesa.
Ir poniendo pequeñas cantidades con una cucharita y cuando los ñoquis comienzan a subir se dejan uno o dos minutos y se retiran con una espumadera y se van colocando en una fuente.
Una vez terminados de cocinar servir enseguida.
Con crema de leche o aceite de oliva.